He terminado el primer bloque de Le quilt Mystère de Véronique Requena. Me está encantando hacerlo, ya os decía que quería disfrutar con este trabajo al que me lancé de cabeza casi sin pensar. Lo estoy consiguiendo. Disfruto eligiendo las diferentes telitas para cada aplicación, haciendo fotos para enseñaros en que ando metida... y saboreo cada una de las puntadas que doy, aunque os puedo asegurar que tengo los dedos un poco... digamos impresentables.
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Me gusta el resultado del bloque. Creo que no ha quedado mal, aunque está claro que tengo que mejorar muchísimo las puntas de las estrellas para que por lo menos tengan eso, puntas. En lo que sí voy notando mejoría es en la puntada escondida. Vamos, que cuando llegue al último bloque seré una artista de la puntada escondida.
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Y bueno, me voy a tomar un respiro antes de ponerme con el segundo bloque del Quilt Mystère. Tengo pendientes algunas cosillas que no quiero abandonar... empieza el SAL de la colcha de la familia con Rosa Server, mañana toca SAL de Esperanza, y en unos días recibiré el BOM My Garden...
Espero que os guste mi trabajo.
No me gustaría agobiaros con todas las entradas que publico de mis pequeños avances. A mí me gusta ir compartiendo con vosotras cada logro por pequeño que sea, pero a veces me pregunto si no os resultará excesivo mi ritmo al publicar.
No sé, hoy estuve pensando en eso mientras cosía.
Me encanta aprender, me apasiona compartir, charlar con gente y me vuelve loca el patchwork; y todo eso si se mezcla bien, se remueve con cariño y se cuece a fuego lento da como resultado este blog.
Estoy encantada con el resultado. No estaba segura de si sería capaz de hacerlo sola,
pero el libro es maravilloso y por fin mis clases de francés están sirviendo para algo...
:-)
Que tengáis un buen fin de semana