Makiko, es una japonesa que vive en España y que nos cuenta que en su país para pedir un deseo hacen 1000 grullas de origami, y nos propone y enseña a hacer una.
La papiroflexia no es lo mío, lo tengo claro, pero esta es mi aportación al proyecto de las mil grullas.
Mi corazón está con Japón
Lo importante es la inteción Dori y tu grulla está hecha con mucho cariño y cargada de muy buenos deseos. Gracias por compartir.
ResponderEliminarNuestro corazón también está con Japón!!
ResponderEliminarUna iniciativa preciosa.
Gracias Dori por tu ejemplo, un detalle muy bonito del que tomo nota. Yo también haré mi grulla por Japón, se lo explicaré a mi hijo de 9 años, seguro que también querra contribuir y hará la suya.
ResponderEliminarMarga B.
Tu corazón y el de todos, ya que la situación no es nada agradable...pero lo importante es que tu intención haciendo esa grulla, es algo importante y es lo que al final cuenta.
ResponderEliminarUn abrazo para Japón
Yo tambien he mandado la mia, me pareció una idea, cargada de sentimiento, y es una pequeña forma de contribuir.
ResponderEliminarBesos y buen finde
Yo también la puse en mi blog ayer, pero la iniciativa la saque del blog de Nora una japonesa que vive en Tokio, hermosa inicicativa, todo por los buenos deseos para que el corazón de los japoneses encuentre un poco de sosiego y calma en esta dura etapa que de nuevo les toca vivir.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Dori! Eso de las grullas lo escuché el domingo en un programa de televisión. Había una chica Japonesa que explicaba que cuando uno desea algo con mucho fervor, tiene que hacer 1000 grullas y el deseo se cumple. Tal vez si cada una de nosotras hace una y pedimos por Japón podamos aportar nuestro granito de arena. Hermosa tu entrada de hoy, te mando un beso desde Argentina
ResponderEliminarDori yo también hice mi grulla, más con el corazón que otra cosa. Besos.
ResponderEliminarDori hermoso tu jesto,yo tanbien hare mi grulla,mi corazon tanbien esta en japon,no importa como este echa lo importante es contribuir,
ResponderEliminarun beso
Coincidimos enviando nuestra grullita a Japón.
ResponderEliminarUn abrazo, Carmen Mª.
Ah!... La papiroflexia tampoco es lo mío.