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viernes, 3 de agosto de 2012

Como niña con... ¿zapatos nuevos?

Hacía un par de años que me había comprado mi máquina de coser. Una Brother con la que estaba super contenta y que funcionaba de maravilla.
Pensaba que me acompañaría durante muchos más años pero...
Uffff, casi ni me lo creo.


Una PFAFF quilt expression 4.0 ha entrado en mi vida.

La conocí hace unos cuantos meses cuando Sonia se compró una y tuve ocasión de verla de cerca.
Es un verdadero capricho. La Ferrari la llamamos cuando nos referimos a la de Sonia.
¿Saco la Ferrari? ¿Puedo coserlo con la Ferrari? ¡Qué bien suena la Ferrari!

Cuando Sonia hace unas semanas se marchó de vacaciones a París, me dijo, ¿porqué no te llevas la Ferrari estos días a casa y la pruebas? Y ufff, eso fue mi perdición.

Hasta ese momento ni por asomo había pensado en cambiar de máquina, pero después de probarla comencé a barajar la posibilidad. Sí, no, ¿qué hago? ¿me la compro? ¿ no me la compro?

Unos días lo desechaba y pensaba que la mía funcionaba de maravilla y que era una locura cambiar en estos momentos de máquina. Otros días pensaba en la facilidad de su manejo  sobre todo con el acolchado y yo misma me convencía de que era el momento ideal de comprarla antes de que subiera el IVA en septiembre. Si esperaba a Navidad o a mi cumpleaños para tener una excusa de compra,  me iba a costar más cara.

Investigué otras marcas, leí mil veces las recomendaciones de Isabel en su blog sobre la elección de la máquina de coser, pregunté a Carmen María porqué había elegido ella la PFAFF... y seguí quitándole pétalos a la margarita.
Sí, no, sí, no, la compro, no la compro, la compro, no la compro...  

¡¡¡¡ Me la compro !!!!

:-)))))))))))))))))

Y aquí la tengo. Casi recién llegada a casita. Comenzando a conocernos un poco mejor.

¿Que qué es lo que me gusta de ella?

Lo primero que llama la atención es el puente. Es grande. Muy grande. El que diga que el tamaño no importa es que no ha intentado acolchar un macro quilt con una de las de puente cortito. :-))))))
Y también me parece fantástico que avise de que la canilla se está acabando... anda que no he cosido yo rato toda contenta y cuando me he dado cuenta, no había cosido nada porque no quedaba hilo en la canilla. Pues esto no pasa con esta máquina. A mí me va a venir de maravilla.
Y también me gusta que le des a un botoncito con la imagen de unas tijeras y te corte el hilo solo. Sí, lo sé, pijotaditas, pero no veáis lo que facilitan el trabajo. Que al fin y al cabo de eso se trata.
Me encanta también lo intuitiva que es con la tensión del hilo, y la forma en que ella misma levanta un poquito el prensatelas para permitirte hacer un giro sin más, porque sí, porque adivina que quieres girar y te ayuda a hacerlo.
:-)))))))))))))

Me queda mucho, muchísimo por descubrir pero estoy segura de que ha sido una muy buena compra.
Algunas de vosotras me habéis preguntado más de una vez que máquina tenía y yo siempre decía... una normalita. Va estupendamente, pero es de las normalitas. Ahora ya no. Ahora tengo una súper máquina y estoy entusiasmada con ella. Y espero coser y coser y coser y coser y coser montones de quilts con ella y compartirlos con vosotras.

Y si alguna está pensando en cambiar de máquina... creo que la PFAFF quilt expression 4.0 es una estupenda elección, o por lo menos a mí me lo parece.  

:-))))))))))
¿Os gusta?

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